Jesús vino a librarnos de nuestras cargas

El Espíritu del Señor está sobre mí,
Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres;
Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón;
A pregonar libertad a los cautivos,
Y vista a los ciegos;
A poner en libertad a los oprimidos;

Lucas 4:18

Si bien la humanidad entera estaba en esta condición, sin Jesucristo. Jesús vino a librarnos de nuestra realidad, una vida espiritual muerta, sin Dios, condenados por el pecado a la muerte. Dios siendo misericordioso, mande a su Hijo para librarnos de esta realidad. En el AT podemos apreciar que en el libro de Isaías se encuentran profecías de lo que haria Jesús con su pueblo.

El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel;
² a proclamar el año de la buena voluntad de Jehová, y el día de venganza del Dios nuestro; a consolar a todos los enlutados; 
Isaias 61:1-2

 Entonces los ojos de los ciegos serán abiertos, y los oídos de los sordos se abrirán.

⁶ Entonces el cojo saltará como un ciervo, y cantará la lengua del mudo; porque aguas serán cavadas en el desierto, y torrentes en la soledad. 
Isaias 35:5-6

En el NT podemos apreciar que Jesús hizo muchos milagros, dándole la vista a ciegos, curando a paralíticos, leprosos, en general curando toda clase de enfermos, y esta es la realidad humana. 

La verdad es que sin Jesús todos padecemos estas enfermedades, Jesús es la respuesta a nuestra debilidad, ceguera espiritual y con el tenemos vida en su nombre. Mucha gente me podrá decir que se encuentra en excelente estado de salud, se mantiene en forma, cultiva su cuerpo, se abstiene de algunos alimentos, pero en verdad si no tienen a Jesús en sus corazones, espiritualmente estan discapacitados y muertos.

Jesús vino a la tierra a darnos vida en su nombre, es necesario aceptar el sacrificio que hizo Cristo en la cruz, arrepentíendose de nuestros pecados, dejándolos atras y no volver hacerlo, invitando a Jesús a morar en nuestros corazones como Señor y Salvador personal. De esta manera tendremos una vida nueva espiritual, guiada por el Espíritu Santo.

Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios.  

Juan 3:3

Este es el plan de Salvación que ha preparado Dios para la humanidad. El hombre dependerá siempre de Dios y sin el seremos siempre convalecientes.

⁷ Que hace justicia a los agraviados,
Que da pan a los hambrientos.
Jehová liberta a los cautivos;

⁸ Jehová abre los ojos a los ciegos;
Jehová levanta a los caídos;
Jehová ama a los justos.

⁹ Jehová guarda a los extranjeros;
Al huérfano y a la viuda sostiene,
Y el camino de los impíos trastorna.

¹⁰ Reinará Jehová para siempre;
Tu Dios, oh Sion, de generación en generación.
Aleluya.  

Samos 146:7-10

Estas son las obras de Dios que tiene preparado para nosotros, solamente cree en Él como Señor y Salvador personal y serás salvo.

"que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo".  

Romanos 10:9

Dios los bendiga!